regalos, obsequios, recuerdos

Como en todas las bodas, al final en los postres se dan unos obsequios de recuerdo, generalmente a las mujeres, por aquello de que nos gustan mas esas cosas. Para mi boda tenia claro que no quería algo típico, por eso me recorrí tiendas y tiendas y no precisamente de cosas de boda para encontrar algo diferente, bonito y que pudiera gustar a todas mis invitadas, y al final lo encontré en una tienda que es super bonita en la plaza de San Idelfonso en Madrid, se llama Nest y como no fue un descubrimiento bloguero.... que habría sido de mi boda sin las "ayudas" blogueras, y estos pajaritos fueron los elegidos para venirse conmigo.

Nadine, que es la dueña de la tienda me ofrecía varios tipos de empaquetados, pero al final me decidí a hacerlo yo misma con la ayuda de mi hermana, había que crear unos nidos para que estos pajaritos no pasaran frío, y con el envoltorio de las magdalenas y un poco de esparto y aquí veis el resultado final:


Y claro estos pajaritos necesitaban una jaula para el momento de ser repartidos, no me entraban todos, así que al final se quedó en algo mas simbólico, mi madre y hermana con toda la bandada en una caja, me ayudaron a que todas tuvieran el suyo:


También es típico regalar un alfiler a las solteras, para que lo pierdan y se casen, lo di a todas las mujeres y niñas, total nadie quería perderlo, y las que lo perdieron me pidieron otro...... menos mal que hice de sobra..... fue un trabajo largo, al ser cabecitas pequeñas, pegar los ojos, coser las bocas..... pero al final quedaron así de monas ellas...
También quise tener un detalle especial para las futuras mamis de había en la boda y personalizé estos bodies con la inicial de los peques, Nicolas y Ainara. Y un tercer bebe del cual no sabemos todavía el nombre se llevó para casa una vaquita de peluche (se me pasó hacerle foto).

Y no se por qué pero en casi todas las bodas coincide que es el cumpleaños de alguien, en la mía fue de una amiga que hizo a la vez de fotógrafa, lo típico es poner una velita en el postre y cantar el cumpleaños feliz, pero su cumple no era hasta el día siguiente, así que ya el momento postre no podía ser, pero no se iba a quedar ella sin su trozo de tarta y le hice este trozo de tarta, con guinda incluida, toda de fieltro para que se la llevara de recuerdo.

Y luego estaban los peques, y algunos no tan peques que pudieron disfrutar con estas brochetas de esponjas, al final no sobró ni una y me quedé con ganas de probarlas.

Y los señores de la boda.... se metieron entre pecho y espalda estos puritos....


Como último obsequio, durante la barra libre y baile coloqué dos vasos gigantes de cristal con un superlazo morado (obvio) uno con chuches y otro con cigarrillos, fueron un éxito.

Para terminar un popurri de fotos de algunos invitados con sus regalos...


Y nada más, ya pocas cosas quedan por contar de ese gran día....
Gracias por la visita y por favor dejarme algún comentario que se que me visitáis en el anonimato....
Croack